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Redecorar tu hogar puede ser una experiencia emocionante, pero también puede ser un desafío. A menudo, las personas cometen errores al intentar transformar sus espacios, lo que puede resultar en un ambiente que no refleja su estilo o, incluso, en un gasto innecesario. Para evitar estos tropiezos, te compartimos los errores más comunes que debes evitar al redecorar tu hogar.

1. No tener un plan claro

Uno de los errores más frecuentes es lanzarse a redecorar sin tener una idea clara de lo que se quiere lograr. Esto puede llevarte a compras impulsivas o decisiones que no se ajustan al estilo que buscas. Antes de comenzar, haz un plan. Define el estilo que te gustaría para cada habitación, los colores que quieres usar y la función de cada espacio. Crear un mood board o un tablero de inspiración en plataformas como Pinterest te ayudará a visualizar mejor tus ideas.

2. Sobrecargar el espacio con muebles

Es fácil caer en la tentación de llenar cada rincón con muebles o decoración, pero esto puede hacer que una habitación se vea pequeña y desordenada. A veces, menos es más. Asegúrate de que los muebles que elijas realmente tengan un propósito en la habitación. Deja espacio para que las personas puedan moverse libremente y no sobrecargues el ambiente. Opta por piezas multifuncionales o que se adapten al tamaño de la habitación.

3. Ignorar la iluminación

La iluminación es uno de los elementos más importantes en la decoración, pero a menudo se pasa por alto. Una habitación mal iluminada puede hacer que incluso los espacios más bonitos se vean opacos o fríos. Asegúrate de tener una mezcla de fuentes de luz: luz ambiental (general), luz de acento (para destacar ciertos elementos) y luz funcional (para tareas específicas). Los bombillos de luz cálida crean una atmósfera acogedora, mientras que las luces LED pueden ser ideales para áreas de trabajo como la cocina.

4. Elegir colores sin probarlos primero

El color es una de las herramientas más poderosas en la decoración, pero elegir un tono sin probarlo en las paredes puede ser un desastre. Los colores pueden verse diferentes dependiendo de la iluminación y el tamaño de la habitación. Antes de pintar una pared entera, compra pequeñas muestras de pintura y prueba los colores en una sección de la pared. Observa cómo se ven a diferentes horas del día y con diferentes fuentes de luz.

5. No tener en cuenta la funcionalidad

Es fácil dejarse llevar por las tendencias de diseño sin considerar cómo funcionarán realmente los elementos en tu día a día. Los muebles o decoraciones muy modernas pueden no ser prácticos para tus necesidades cotidianas. Asegúrate de que todo lo que añadas a tu hogar tenga un propósito práctico. Pregúntate si el mueble es cómodo, si el estilo se adapta a tu rutina diaria y si los materiales son fáciles de mantener.

6. Descuidar la escala y proporción

A menudo, los muebles y decoraciones se compran sin tener en cuenta las proporciones de la habitación. Poner una pieza grande en un espacio pequeño puede hacerlo sentir abarrotado, mientras que un mueble pequeño en una habitación grande puede hacer que se vea vacío. Tómate el tiempo para medir el espacio antes de comprar nuevos elementos. Escoge muebles que se adapten bien al tamaño de la habitación y distribúyelos de manera que favorezcan la circulación.

7. No considerar la cohesión del estilo

Es común ver habitaciones con muebles y decoraciones que no se complementan entre sí, creando un ambiente incoherente o caótico. La falta de un hilo conductor en la decoración puede hacer que tu hogar se sienta desordenado. Mantén la coherencia en tu estilo. Elige una paleta de colores y materiales que puedan trabajar juntos a lo largo de tu hogar. Si decides seguir una tendencia, asegúrate de que no sobrecargue el espacio.